miércoles, 1 de septiembre de 2010

ABLACIÓN FÍSICA Y ABLACIÓN MENTAL


ABLACIÓN FÍSICA Y ABLACIÓN MENTAL 
Con cariño y admiración para dos madres
ejemplares: Waris Dirie y Samia Shariff.

La ablación, mutilación o circuncisión femenina, es una práctica aberrante que consiste en extirpar el clítoris y los labios menores de las vaginas de niñas aún impúberes; ésta se realiza, sin precauciones sanitarias ni anestésicos, utilizando viejos cuchillos de cocinas, navajas o bisturís ya desechados, sucios pedazos de vidrio afilados e incluso hasta viejas hojas de afeitar o cortaúñas. Cuando la extirpación es total a tal operación se le llama infibulación y la herida que ésta produce se cose dejando una pequeña abertura del tamaño de un grano de guandul a fin de que sólo salga la orina y el flujo menstrual. Gran parte de las niñas, sometidas a tales prácticas, mueren desangradas in situ, otras mueren de tétanos y algunas más fallecen al crecer debido a la retención del líquido menstrual producido por la infibulación; y lo penoso es que, tales niñas, son sometidas a ese acto de barbarie, que se lleva a cabo por motivos culturales y religiosos, por sus propias familias, con la supuesta intención de purificarlas y alejar así de sus entornos los acuciantes demonios del deseo sexual. Tal es la denominada ablación física, la cual fue responsablemente denunciada por una de mis heroínas, Waris Dirie, en su libro autobiográfico Flor del Desierto (1997), el cual fue luego llevado al cine en el 2009.
Mas, desde mi óptica, también existe la ablación mental, que es aquella práctica de abuso sicológico (sin que deje de concurrir también el abuso físico), denunciada por otra de mis valientes heroínas, Samia Shariff, en su obra, también autobiográfica, El velo del miedo (2006). Sabemos que son muchos los abusos que a diarios se comenten en el mundo en contra de las mujeres y que estas valientes escritoras sólo nos han expuesto en sus libros los que fueron contra ellas cometidos.
Samia Shariff, después de denunciar, en su extensa y muy valiosa novela, los viles y numerosos abusos cometidos, primero contra ella y luego —además de continuar abusando de ella— contra sus hijas Norah y Mélissa; abusos éstos motivados también por meros asuntos religiosos y culturales; para colmos, llevado a cabo, por el solo hecho de ser mujeres,  no tan sólo por su familia sino también por su pueblo, nos dice al final de su obra:
«Deseo que todas las mujeres oprimidas del mundo puedan un día sentirse liberadas y conocer la felicidad que hoy soy capaz de experimentar.
»Creo sinceramente que todas mis desdichas del pasado se están transformando, una a una, en alegrías. ¿Y si fuera ése el precio que había que pagar? Sí, he sufrido mucho, pero en la actualidad disfruto cada instante de paz que la vida me brinda. Soy una mujer libre, consciente y digna de ello.
»Antes creía tenerlo todo cuando en realidad no tenía nada; pero a fin de cuentas lo tengo todo, porque soy libre.
»He perdido todo cuanto poseía para obtener todo lo que nunca había tenido.
»Vivo una existencia apacible con mi familia en un humilde apartamento de un barrio desfavorecido al oeste de Montreal. No obstante, por nada del mundo volvería a mi palacio de Argelia...»
¡Ah las religiones y su gran fardo de abusos e ignominia en contra de la humanidad! No en vano dijo un gran pensador que, tales, son el opio de los pueblos.
Aprovecho este preciso instante para, desde aquí y en nombre de todas las mujeres de mi familia y de mi país, así como también de algunos de sus hombres de bien que saben valorar y respetar a la mujer, para dar las gracias a Waris Dirie y a Samia Shariff (a ésta última al junto de sus hijas y compañeras de martirologio Norah y Mélissa Shariff ) por su sufrida, pero inmensa valentía; gracias por atreverse a concebir estas dos obras que hoy resultan esenciales para poder cimentar la libertad de la mujer, que es, a resumidas cuentas, el reafirmar la propia autonomía democrática de la humanidad completa. Ciertamente, mujeres como ustedes me hacen sentir orgulloso de haber sido concebido y luego forjado por una mujer como mi madre: Grecia María Batista. Ojalá, amigos y amigas, que todos ustedes puedan tener la oportunidad de reflexionar, llorar, sufrir y hasta padecer o disfrutar, como lo hice yo, con sus obras autobiográficas Flor del Desierto y El velo del miedo.

Autor: Rodolfo Cuevas©: 27/08/2010;
todos los derechos reservados, Ley 65-00.

42 comentarios:

Anónimo dijo...

Querido Rodolfo, conmovedora y real historia, en varias culturas la Mujer no es nada, solo sirve para procrear y dar placer y lamentablemene eso sigue en algunas partes del mundo.
me conmovió mucho tu escrito, pero con esto dejas bién claro el valor de una Mujer, según muchos el sexo débil.
Waris Dirie una hermosa Mujer por fuera y por dentro, luchadora incansable que consiguió un lugar muy importante en la sociedad y el reconocimiento del mundo entero con su lucha.
Samia Shariff, de ella no lei nada pero admiro, respeto a ese tipo de Mujeres que lo dan todo a pesar de su sufrimiento.
Es algo aberrate todo eso y queda un sabor amargo al leerlo, pero a la ves es algo que enaltece a la Mujer.
Te felicito querido amigo por mostrarnos y recordarnos a estas Mujeres grandes, fuertes que son simplente una Mujeres.
Querido Rodolfo en el blog El Sentir del Poeta hay un Mimo para ti, espero lo aceptes con todo el cariño del sentir del poeta.
besitos para ti querido amigo, que Dios te bendiga, ya te estaba extrañando.

Alondra dijo...

¡Hola Rodolfo! El tema es muy duro pero fíjate si las raices están bien agarradas en la mente de esta gente que hace poco una familia que llevaba viviendo años aquí en España, la madre denunció al padre para que su hija no se fuera de vacaciones con los abuelos porque el fin era hacer cumplir la tradición...
Como mujer que disfruta de libertad para entrar y salir de casa, para vestirme como quiera, para trabajar y educarme y ser una compañera en plano de igualdad con el hombre; me duelen muchísimo esas situaciones y espero que la cultura que algunas van adquiriendo sea el empujón para otras.
Un abrazo

Pedro F. Báez dijo...

Regresas, Rodolfo querido, a certero golpe de machete, desmochando todo el sofisma en torno a estas prácticas de barbarie y presentando una objetiva y desgarradora exposición de ambos procesos (físico y mental) que son y están ineludiblemente relacionados. No sólo es la religión el opio de los pueblos, sino que de ese opio se sirven las jerarquías religiosas y de poder en todas partes del mundo. Dios es un ser de amor y de apremiantes realidades. Si nos hizo a su forma, entonces somos perfectos con todas nuestras imperfecciones, porque sólo siendo imperfectos podemos superarnos para aspirar a ser mejores con nosotros mismos y con nuestro prójimo. Todo lo demás son inventos y ridiculeces. Como dice una gran amiga mía, eminente psicóloga y activa voluntaria de causas sociales: "Dios está demasiado ocupado con toda la porquería que le echamos encima para ocuparse de sandeces tales como qué comemos (se refiere a las restricciones dietéticas observadas en diferentes religiones), con quién nos acostamos o si vamos o no a la iglesia..." Me sumo a ti en mi denuncia contra estas prácticas retrógradas e insultantes que mutilan física y mentalmente. Cada cual tiene el derecho a escoger su Dios y su culto, pero no a expensas del cuerpo y del alma de seres indefensos y subalternos. ¡Basta ya de abusar, matar y oprimir en nombre de Dios y de la religión, cualesquiera que éstos sean! Mi solidaridad y mi homenaje a estas mujeres y para ti, todo el cariño y la admiración de quien te considera como un hermano y como un ejemplo a emular y seguir. Te dejo con un poema que escribí para la madre de una querida amiga de España, quien fue abusada por su marido hasta que decidió crecerse y echar a andar. Ojalá que sirva de indicio para que sepan las mujeres que en sus manos está tomar las riendas de sus propios destinos:

"Poema al valor de una mujer"

Dedico este poema con profundo respeto a la madre de mi musa española y a todas las mujeres maltratadas en cualquier parte del mundo. Sólo tienen que abrir las alas y echarse a volar...

Mujer
que has sufrido
insolentes amagos
y púrpuras tatuados
sin pedirlo
en tu rostro.

Que has probado
el salitre
de tu propia
sangre
en el labio violado
por mísero puño.

Cuyo escudo
de entonces
fueron sólo las manos
—palomas voladas
en raudo aleteo—.

Mujer
que volaste
haciéndote
al aire
dejando
atrás
el espectro
de efímeras
promesas.

Mujer
enorme
y gloriosa
del tamaño
de un planeta.

Tus brazos
se hicieron recios
al bregar de la contienda
dando siempre
de tu centro
la energía y la nobleza
que fue infundiendo
en tus hijos
un sentido de grandeza
para la madre
que amante
y sin alarde o vergüenza
demuestra
que los ovarios
son cojones
de tigresa.

Un gran abrazo un beso para ti, hermano mío

EL AVE PEREGRINA dijo...

Conmocionante entrada,es increíble...pero cierto...que se cometan en pleno siglo XXI estas barbaries...jugando de esta manera con la vida de las personas...de sus propios hijos...¡increíble!.¡In creíble! también es que no se ponga punto y final,que las creencias que atentan contra la vida se sigan llevando a cabo, que no exista una persona que tenga ese báculo poderoso y diga...¡basta!, ¡Dios mío...que tristeza!.
Son dignas de admirar tanto Waris como Samía y desde estas letras les deseo lo mejor del mundo pues su calvario ya pasaron.
Rodolfo, es agradable leer este elogio que le brindas a tu querida madre, seguro que desde el cielo aportará su parte para que todas estas aberraciones desaparezcan.

Un abrazo,amigo.

Mayte Llera (Dalianegra) dijo...

Impresionante este post que nos ofreces, querido Rodolfo. Ojalá que todos los hombres pensasen como tú, y no tendríamos estas costumbres ancestrales, nacidas en el seno de religiones obsoletas y absolutamente machistas y discriminatorias. Y es que nada hay más bárbaro que la mutilación, la física y la ideológica. La ablación es monstruosa y la sola idea de someter a una criatura a ella, para colmo una criatura de corta edad, con gran riesgo para su salud y para su vida, y con el único fin de mutilar también el posterior deseo sexual y así garantizar al macho la fidelidad a ultranza de su compañera, aun cuando él puede practicar la poligamia...Aunque no sé si la mutilación mental y psicológica que bajo estas mismas religiones se practica, podrá ser aún peor. es increíble que para que el hombre pueda sentirse seguro de sí mismo tenga que someter a la hembra de su especie, en teoría, a su complemento, a una serie de vejaciones y torturas, a la pérdida de todos sus derechos como ser humano y como ser vivo...Pero: ¿tanto nos temen? Quizás ahí debería de buscarse la respuesta del porqué las religiones en general han oprimido y aplastado a la mujer como si de un mal necesario se tratase, para reducirla a una simple esclava reproductora y generadora de placer para el macho. Un hurra por esas mujeres valientes que luchan por lo que por ley natural siempre debió ser suyo. Un beso fuerte, mi querido amigo, y mi enhorabuena por tu contribución para mejorar el mundo.

Anónimo dijo...

tengo un pequeño escrito que dice: "las religiones siempre serán ideologías limitantes; y el espíritu es libre. ¡Hagamos una huelga!".
da mucha pena que aún hayan comunidades escudándose bajo remedos de tradiciones (ser culto es otra cosa). la mujer una fortaleza invisible e invencible. pregunto: ¿cuántos de ellos se cortaron sus penes?. tremendo post mi queridisimo hermano.
te abrazo

Liliana G. dijo...

"El camino del infierno está empedrado de buenas intenciones...", dice un refrán, pero yo pregunto ¿son realmente "buenas" las intenciones de quienes cometen estas atrocidades.
En otras épocas podíamos decir que había pueblos "atrasados", donde la barbarie obedecía a la ignorancia, pero hoy en día, quien más quien menos tiene acceso a un mínimo de información, que bien utilizado, daría paso a un mínimo de cordura para evitar estas aberraciones, que no se pueden aceptar de ninguna manera como parte de la cultura de un país.

Tengo pendiente la lectura de estos dos libros que recomendaste, Rodolfo (merced a mi poquísimo tiempo de ocio), pero me haré un lugar para dedicarles. Ya he visto a estas magníficas mujeres en sendas conferencias, es conmovedor.

Un beso inmenso, mi querido hermano.

Paco Merlo Ansin dijo...

Hola!! Ya sabrás que sigo tu blog y seguramente el mio te interese. Disfruto y aprendo mucho con tu ingenio, tu manera de ver la vida, de vivirla, tu arte ... y de lo que nos transmites. Yo humildemente intento aportar lo que pueda, te regalo mis flores, te dejo paraguas, comparto contigo mi gente (compañeros de trabajo, familia,mis mascotas, mis vecinos, también mis vecinas!) y quizas estes esperando a que publique más fotos. En esto último mi cabeza divaga, duda y parece que nunca me voy a decidir... Y tú esperando ...

Mayte Llera (Dalianegra) dijo...

Hola de nuevo, mi querido Rodolfo, vengo a dejarte el enlace del blog de una buena amiga que acabo de descubrir que es paisana tuya, para que así, si lo deseáis, podáis leeros, ya que ambos sois dominicanos, aunque, y si no me equivoco, ella reside ahora en España. Pero, por su última entrada, echa de menos su patria añorada y quizás conociéndote alivie su nostalgia. A ella también le acabo de dejar el enlace de tu blog.

http://beaclick.blogspot.com/

Un beso enorme y muy feliz fin de semana, querido amigo.

Jorge V. dijo...

Querido amigo Rodolfo, después de bastante tiempo vuelvo a tu blog. A medida que iba leyendo tu post mi sonrisa soleada como el día de hoy se fue trasmutando en una mueca amarga. No lo lamento porque tu entrada es impecable y todo será poco para pones las cosas en su sitio.
En otro orden de cosas estoy escribiendo una novela romántica y de reivindicaciones sociales dentro del concepto de realismo mágico que se desarrolla en el Caribe. Ante la imposibilidad de viajar me documento con Internet y bibliografía. Ahora mismo estoy leyendo “El Caribe contemporáneo” de Gerard Pierre-Charles. Editorial Siglo XXI. Muy interesante , además enfocado desde el anti imperialismo.
Un fortísimo abrazo, amigo mío.

Anónimo dijo...

Rodolfo, amigo, se que en estas épocas actuales,posmodernas y demas, suena a medioevo esto de la ablación y dem{as, pero porque juzgamos otras culturas, en este caso no estoy en defensa ni de ablaciones,ni castigos y demas, de NINGUNA MUJER DEL MUNDO,
solo me hago esta pregunta
un abrazo enorme
lidia-la escriba

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

El Sentir del Poeta:
Saludo, amiga Noemí; sé que el comentar situaciones tales como las aquí expuesta resulta un tanto desagradable para aquellos que no saben que dichas cuestiones existen en el mundo, quedando en ellos, luego de leerlo, ese "amargo sabor" al que hace referencia. Creo que, por encima de todo, debemos cimentar, incrementar y defender el valor de la mujer en el mundo. Me alegra mucho que te haya gustado mi escrito. Gracias por tu premio, el cual ya exhibo en mi página, también por tu agradable comentario.
Besos y abrazos muuuy tiernos para ti, amiga preciosa.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, querida Alondra:
Así es, amiga, es éste un tema bastante urticante; pero, para que tales aberraciones cosas puedan cambiar, es necesarios denunciarlas.
Tal y como enuncias aquí, sucedió con Samia Shariff que la enviaron de vacaciones donde una tía en Francia, pero en realidad era para comprometerla en matrimonio con alguien mayor que ella, y a quien ni siquiera conocía... gracias a Dios que, en el caso que indicas, la niña tuvo una madre protectora.
El hecho de que existan mujeres que defiendan y aprecien su libertad y las de las demás, como es tu caso, es ya un gran empujón...
Recibe un gran abrazo, querida amiga alondra.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludos afectuosos, mi muy querido Pedro:
Como siempre, amigo hermano, acaba de complementar mi escrito de manera perfecta; pues, muchas cosas que a mí me hubiesen gustado decir las ha dicho en tu irrefutable comentario, ejemplo:
«No sólo es la religión el opio de los pueblos, sino que de ese opio se sirven las jerarquías religiosas y de poder en todas partes del mundo. Dios es un ser de amor y de apremiantes realidades. Si nos hizo a su forma, entonces somos perfectos con todas nuestras imperfecciones, porque sólo siendo imperfectos podemos superarnos para aspirar a ser mejores con nosotros mismos y con nuestro prójimo. Todo lo demás son inventos y ridiculeces.»
También recalco de manera absoluta:
«¡Basta ya de abusar, matar y oprimir en nombre de Dios y de la religión, cualesquiera que éstos sean! Mi solidaridad y mi homenaje a estas mujeres...»
Me impactó, y muy profundamente, ese hermoso poema que dedicaste a tu amiga española abusada tan continuamente por su marido, es una poesía ejemplar; ojalá y que todos los que aquí confluimos puedan leerla y apreciar la dura, pero poderosa belleza de sus versos. Sobretodo me encantó esa gran estrofa final:
«Tus brazos
se hicieron recios
al bregar de la contienda
dando siempre
de tu centro
la energía y la nobleza
que fue infundiendo
en tus hijos
un sentido de grandeza
para la madre
que amante
y sin alarde o vergüenza
demuestra
que los ovarios
son cojones
de tigresa.»
Te quiero hermano mío, y ojalá que, en el mundo, existan por lo menos diez hombres como tú.
Recibe mi más grande abrazo.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

El ave peregrina:
Saludo, querida Asun. Para mí, amiga, también resultaba increíble, según y que leía tales historias, las vidas que les habían tocado vivir a estas mujeres y me preguntaba: ¿Cómo es posible que a estas alturas del desarrollo de la civilización humana existan aún tanto abusos contra seres indefensos como, en tales casos, niñas? ¿Cuándo el MUNDO (así en mayúscula), que persigue y mata a seres indefensos por su ideas, pondrá fin a tales prácticas tan aberrantes? ¿Cómo es posible que existan personas que aún aúpan y practican en sus hijas tales aberraciones y otras que (en nombre de la cultura) se las justifican? Pero, luego de leer tu comentario, advertí que, en verdad, no estoy solo.
En cuanto a mi querida madre se refiere, ella, donde quiera que esté, ha de sentirse muy orgullosa, pues de ella aprendí que hombre y mujeres son seres humanos iguales y que, por tanto, tienen o deberían tener los mismos derechos.
Gracias y recibe mi más fuerte abrazo, amiga Asun.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi querida Mayte:
Espero, amiga bella, que hayas disfrutado de tus muy merecidas vacaciones.
Tu comentario es regio y sin desperdicio ninguno, pues, así como dices es, Mayte:
«...es increíble que para que el hombre pueda sentirse seguro de sí mismo tenga que someter a la hembra de su especie, en teoría, a su complemento, a una serie de vejaciones y torturas, a la pérdida de todos sus derechos como ser humano y como ser vivo... Pero: ¿tanto nos temen? Quizás ahí debería de buscarse la respuesta del porqué las religiones en general han oprimido y aplastado a la mujer como si de un mal necesario se tratase, para reducirla a una simple esclava reproductora y generadora de placer para el macho. Un hurra por esas mujeres valientes que luchan por lo que por ley natural siempre debió ser suyo.»
Creo, amiga, que todos los hombres que abusan de sus mujeres (sean hijas, hermanas, amigas o esposas) merecen ser castrados.
Un beso y un abrazo grande, bella Mayte.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi querido Reltih:
Bello escrito es éste que aquí nos dejas; como poseo un espíritu libre, me sumo a esa huelga anti-religiosa que propones...
Ojalá que muchos (y también muchas) puedan leer esto que aquí dices:
«da mucha pena que aún hayan comunidades escudándose bajo remedos de tradiciones (ser culto es otra cosa). la mujer una fortaleza invisible e invencible. pregunto: ¿cuántos de ellos se cortaron sus penes?»
Tremenda pregunta es ésta, hermano Reltih.
Recibe mi más sólido abrazo.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi muy estimada Lili:
Así es, "de muy buenas intenciones" está empedrado ese maldito camino, pero, casi siempre, somos los mismo seres humanos que nos forjamos nuestro calvario; pues, leyendo a Samia Shariff, nos percatamos de que la carcel más fuerte en que ella estuvo encerrada fue en su propia mente, alimentada ésta por el afectuoso amor que le tenía a su familia y más aún a quien más la maltrataba: su querida madre. Ella pudo denunciar todos los abusos a que le sometían pero, por amor a sus padres y hermanos, nunca lo hizo. Suerte que la providencia le envió dos fuertes aliadas en las figuras de sus hijas.
Ojalá y que mucho retrograd@s puedan leer esto que aquí escribes:
«En otras épocas podíamos decir que había pueblos "atrasados", donde la barbarie obedecía a la ignorancia, pero hoy en día, quien más quien menos tiene acceso a un mínimo de información, que bien utilizado, daría paso a un mínimo de cordura para evitar estas aberraciones, que no se pueden aceptar de ninguna manera como parte de la cultura de un país.»
Besos y abrazos inmensos, hermana querida.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi querido Paco:
Gracias por seguir mi blog y por esas bellas palabras que hoy me dedicas; yo también te sigo y agradezco mucho el que hayas decidido publicar nuevas fotos, ya que éstas, tus fotos, me fascinan...
Gracias del alma, amigo Ansin, por todos tus valiosos aportes. Te visitaré siempre.
Un gran abrazo.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo de nuevo, Mayte querida:
Y gracias por dejarme la dirección del blog de esta compatriota, el cual inmediatamente visité; en verdad tienes ella un buen espacio virtual...
Miles de besos y abrazos para ti, bella Mayte.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo y bienvenido sea nueva vez, apreciado Jorge:
Perdoname por haber trastocado en una muesca tu soleada y hermosísima sonrisa... Soy de aquellos que entienden que si la literatura no cumple con los objetivos sagrados de instruir, divertir, entretener y/o, en este caso, denunciar y hacer reflexionar a alguien, entonces no vale la pena...
Gracias, amigo, por reconocer el valor de mi escrito.
En cuanto a tu novela, te deseo el mayor éxito posible... A mí, muy particularmente, me fascina el relismo mágico... especialmente ese tan propio del Caribe insular...
Fuertes abrazos para ti, mi querido Jorge.

Marina-Emer dijo...

pues para saludar y hacerme seguidora de tu blog
feliz semana mi blog"Espigas del almaIII"
encantada ...un abrazo
Marina

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, muy estimada Lidia:
Sin que esto que diré represente ofensa de ningun tipo de mí hacia ti, te confesaré que si el propugnar por la libertad, autodeterminación, decoro, dignidad, integridad e igualdad del ser humano, en este caso de la mujer aún abusada, constituye juzgar a otras culturas; entonces y sin arrepentirme jamás, muy gustosamente, lo hare por siempre.
Recibe un muy fraternal abrazo de mi parte, Lidia querida.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludos afectuosos, Marina-Emer:
Bienvenida seas a mi blog; gracias por seguirme y por tus parabienes.
Para mí, tu presencia en mi espacio, constituye un alto honor, por tanto, yo también te sigo.
Un gran abrazo.

Vicsabelle dijo...

Cada vez que encuentro este tema y otros similares, me acongojo. Me lleno de indignacion y mas aun en pleno siglo XXI. Es cierto que las religiones son un enorme tumor dentro de las sociedad y que sus raices fuertes son dificiles de eiliminar, pero aun es mas dificl asimilar que civilaciones tan antiguas no hayan evolucionado. Que la mujer siga siendo el blanco perfecto de maltrato, humillacion y decredito cuando es ésta la que sostiene el mundo girando. !Es ironico! y terrible.
Aun no he tenido la oportunidad de leer ninguno de los libros auque he visto y leido varios documentales al respecto principalmente de Waris Darie.

Un abrazo de corazon, mi querido Rodolfo

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludos, apreciada Vicsabelle:
Lo increible del asunto del maltrato, mi estimada amiga y compatriota, es que, casi siempre, vemos que el maltratado, en este caso la mujer, colabora, de manera consciente o inconsciete, con quien le maltrata; vemos también la gran influencia que costumbres, tradiciones y culturas ejercen en dichos abusos; pues las mujeres son mucho más religiosas y apegadas al respeto y a sus raices familiares (padres, hijos o maridos) que los hombres y tienden a denunciar los abusos cuando ya hace mucho que acontecen.
Comparto muy plenamente contigo el punto de vista de que la mujer mantiene al mundo girando, pues me parece que éste no tendría razón de ser sin su existencia... Sabes, amiga, desde siempre me he preguntado: ¿Por qué tantos y tantos abusos en contra de un ser tan tierno?
Miles de abrazos para ti, apreciada compatriota.

MTeresa dijo...

Es absolutamente estremecedor,
una práctica repugnante y
miserable que ata a la
mujer a la infelicidad
y la insatisfacción.
Debería estar penada

Marina-Emer dijo...

si yo creo que la mujer aun no esta lo suficiente valorada aunque algunas Naciones quieran afirmar que esta valorada cien por cien pero no es asi y en esas naciones que esta tan maltratada no se que hacen ya los gobernantes...buen fin de semana y un abrazo
Marina

María dijo...

Hola, amigo Rodolfo:

Parece mentira que sigan ocurriendo estas cosas, es como una especie de esclavitud, creo que es la palabra que mejor lo define.

Un beso.

Marina-Emer dijo...

he venido a desearte buen fin de semana
un abrazo
Marina

J.M. Ojeda dijo...

¡Hola Rodolfo!
Sí, el tema es sangrante.
Todas las culturas, tienen su negrura. Toda la humanidad es culpable de estas atrocidades.
Todos debemos y unidos terminar con esas lacras...

Saludos de J.M. Ojeda.
Buena semana.

Melody Paz dijo...

Que horror, que tristeza, cuanto sufrimiento en nombre de mantener las costumbres y pautas culturales, de una sociedad patriarcal y machista, donde las mujeres valen camellos, o la nada.
Como siempre muy interesante tus post.
Besitossss Rodolfito.

María dijo...

¿Te animas a participar el día 8 de octubre publicando en tu blog algo sobre la convivencia?

Un beso.

Mayte Llera (Dalianegra) dijo...

Mi querido Rodolfo, ayer me concedieron una serie de premios que deseo compartir y tú eres uno de los nominados. Cuando gustes, pásate por mi blog principal y recoge un lote de cinco premios que comparto de forma conjunta. En mi último post, cuyo enlace te facilito, verás posteado el enlace a este blog tuyo:

http://maytedalianegra.blogspot.com/2010/09/premios-que-comparto.html

Te dejo un montón de besos y abrazos, mi querido y entrañable amigo de allende los cálidos mares...

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, apreciada María Teresa:
Comparto ese punto de vista contigo, tales acciones deberían estar penadas a nivel internacional y sancionadas con muy extrema dureza, pues, tales, son actos de barbarie.
Un abrazo, dulce amiga.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, querida Marina-Emer:
Me parece que tienes plena razón, pero, ¿sabes algo?, a veces los mismos gobiernos de tradición machista y patriarcal fomentan tan viles actos.
Mi mejor abrazo para ti, Marina; gracias por tus parabienes, te los deseos al doble.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi muy querida amiga María:
No sólo parece mentira, sino que da pena y vergüenza la ocurrencia de tales actos en época tan lejana del medioevo; es importante saber que la legislación internacional califica tan aberrantes acciones como actos de barbarie.
Besos y abrazos, querida María.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, amiga Marina-Emer:
Perdón, Marina, por la tardanza de esta respuesta, se debe a que vivo algo escaso de tiempo. A partir de mañana te deseo el mejor de los fines de semana; mientras tanto, recibe mi mejor abrazo.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Mi saludo afectuoso, J.M.:
Triste verdad esa que dices: «Todas las culturas, tienen su negrura. Toda la humanidad es culpable de estas atrocidades.
Todos debemos unirnos y terminar con esas lacras...»
Ojalá y que sea pronto...
buen fin de semana junto a mi más fraternal abrazo, amigo Ojeda.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Mi más tierno saludo, preciosa Melody:
Sí, es muy penosos, pero bastante penoso, que aún en mucho lugares del mundo se maltrate a la mayoría de las mujeres por sólo mantener rancias costumbres y tradiciones desfasadas impuestas por machos igual de desfasados que creen que ser hombre es maltratar a su compañera.
Dulces besos y cálidos abrazos para ti, Melody hermosa.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

María:
Haré mi mejor esfuerzo, María bella; ojalá y que la memoria no me traicione.
Te abrazo de nuevo, amiga querida.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Mayte:
Saludo, siempre bella Mayte:
Te felicito por todos esos premios recibidos, pues lo mereces todos y más... y gracias del alma por compartirlos conmigo, valoro mucho ese gesto tan hermoso con que me distingues... en el momento oportuno los recogeré. Gracias del alma...
Sean para ti mis más tiernos besos y abrazos, feliz fin de semana, amiga Mayte.