miércoles, 24 de noviembre de 2010

EN CUANTO AL DEFENSOR DEL PUEBLO, UN LLAMADO A LA CONCIENCIA CIUDADANA


EN CUANTO AL DEFENSOR DEL PUEBLO, UN
LLAMADO A LA CONCIENCIA CIUDADANA

El Congreso bicameral (diputados y senadores) de mi país está abocado a escoger al Defensor del Pueblo u Ombudsman (comisionado, representante o protector de los hombres), será ésta la primera vez que se le designa, pues, desde el 2001 para acá, se hicieron varios fallidos intentos por escogerlo los cuales, por razones muy obvias, no se materializaron; muchos de mis paisanos, en referencias a mi artículo publicado en La Página del Sembrador y otros medios el 14 de octubre pasado, intitulado Defensor del Pueblo y Derechos Humanos, me han preguntado, con reiteradas insistencia, en qué consiste tal figura, en dónde radica su importancia y sustento legal y qué hace éste; aquí, trataremos de contestar dichas inquietudes.

A mis hermanos dominicanos y, por qué no, a todos mis amigos y seguidores que no tengan muy claras cuales son las funciones de tan importante figura de Estado, les diré que el Defensor del Pueblo u Ombudsman no es más que un supervisor que tiene por misión verificar la correcta aplicación de las leyes por los órganos estatales (funcionarios públicos, jueces, fiscales, policías, militares y otros) y velar por la buena marcha de las relaciones dadas entre las empresas prestadoras de servicios públicos, que operen en el territorio del pueblo, y sus usuarios; asimismo, debe contribuir a preservar y proteger los derechos, garantías y privilegios que otorgan las constituciones, las leyes y los principios generales del Derecho a los ciudadanos y habitantes de la nación; así como también, supervisar, mediar y corregir los excesos, abusos y violaciones que, contra éstos, cometan los administradores de los poderes públicos o de aquellas empresas privadas que prestan servicios públicos. En cuanto a su sustentación legal se refiere, en Dominicana, dicha estatal figura, posee rango constitucional (Art.:190 al 192) y una ley (la 19-01) desglosa cuales son las funciones a él inherentes.

Si observamos bien lo antedicho, colegiremos que, el Defensor del Pueblo u Ombudsman, es la figura que da al pueblo humilde, llano y trabajador el derecho a disentir y hacerse sentir constitucionalmente; por tal razón, se hace sumamente importante que impidamos que, en tal puesto, instalen a un títere que responda a algunos de los sectores de poder, a algunas de las iglesias, al empresariado público, a uno de los partidos políticos o que sea alguien servil a foráneos intereses; debemos luchar, entonces, porque, nuestro  Defensor del Pueblo u Ombudsman, sea una persona comprometidas sólo con los mejores intereses del pueblo.

Muchos dominicanos (entre ellos hasta algunos candidatos a defensores del pueblo) piensan que el Defensor del Pueblo u Ombudsman es un confrontador natural para con los poderes públicos; pero éste, más que un adversario de tales poderes públicos, debe ser un ente de paz, de moderación, comprensión y conciliación; pues él, como el magistrado moral que es, no es más que un atalaya que vigila, supervisa y media entre las relaciones dadas entre éstos, el pueblo y los empresarios que prestan servicios públicos. Su poder, más que militar, policial o judicial, es fáctico y mediático; su límite es la ley, por tanto no es subalterno de nadie; su ejército: el apoyo popular y sus armas son: la legalidad y la razón...

Espero que, con estas breves explicaciones, todos los dominicanos —que, en tal caso, son lo que tienen el derecho a elegir u objetar— y mis amigos y seguidores que lean esta nota, se hayan percatado de la importancia que, para un país cualquiera, posee la pulcra y correcta escogencia de tal figura de Estado; por tanto, espero que, cuando el órgano correspondiente —Cámara de Diputados (del 22 al 30 de noviembre a partir de la 9:00 a.m. en el salón de la Asamblea Nacional) o Senado de la República— llame a vistas públicas para su escogencia, los buenos dominicanos acudan a aupar las bondades de las más idóneas figuras allí presentes y a objetar a las malas. Recuerden bien que ya nos advirtió Martí que: «Gobiernan los malos cuando los buenos se tornan indiferentes».

Autor: Rodolfo Cuevas©: 9/10/2010;
todos los derechos reservados; Ley 65-00. 

viernes, 19 de noviembre de 2010

TE HAS IDO, AMIGO DEL ALMA




Momento en el que era recientemente condecorado por el Presidente actual



Amigos y amigas, el jueves 18 del presente mes, murió en el Mont Sinai Medical Center de la ciudad de Nueva York don Freddy Beras Goico, el gran maestro del humor de la República Dominicana y unos, si no el más, de todos sus prestantes comunicadores; tuve el honor de ser su subalterno, cuando fui ayudante de escenografía para su programa EL GORDO DE LA SEMANA y, allí,  pude aquilatar su inmenso don de gente. Desde aquí, con el alma compungida, rindo un homenaje sincero a su memoria.


TE HAS IDO, AMIGO DEL ALMA



“Quiero que me recuerden con una sonrisa,
No para mí sino para mis hijos y nietos”
Freddy Beras Goico.

Te has ido, amigo del alma,
y, con tu abrupta partida, ha perdido
nuestro pueblo al mejor de sus atalayas;
pues eso fuiste por siempre: un fiel vigía
de sus aún exiguas libertades democráticas.

Al extinguirse tu fructificante vida,
también se apagó tu voz de trueno;
y, al apagarse el tronar de tus misiles,
no has sumido en el más hondo
de todos los letargos posibles.

Desde aquí, expreso mi dolor ante tu ida,
cortejado por esa admiración sin nombre
que me ha de acompañar durante toda la vida;
sabiendo que tú, muy estimado Freddy Beras,
si supiste comportarte como ha de hacerlo un hombre:
honrando bien a su patria e incrementando su renombre.

Desde aquí imploramos, insigne gladiador de la libertad,
porque tu alma filantrópica, llena de luz y de bondad,
logre descansar en paz y, por siempre, con una sonrisa
emergiendo a flor de labios, te recordaremos con amor…

Autor: Rodolfo Cuevas©: 19/11/2010;
todos los derechos reservados, Ley 65-00.

domingo, 7 de noviembre de 2010

CÓLERA, TOMÁS, GRIPE Y LEPTOSPIROSIS


CÓLERA, TOMÁS, GRIPE Y LEPTOSPIROSIS

El extraño huracán Tomás ha dejado, tras sus húmedos y lluviosos pasos por la isla  de Quisqueya o Hispaniola que, cuales hermanos siameses, comparten Haití y Dominicana, muchos miles y miles de desplazados, seis muertos, muchos otros buenos miles de personas incomunicadas y casi igual cantidad de personas incontactadas (aún no desaparecidas); así como también, ha provocado un incremento en la epidemia del cólera, sumando a ésta dos nuevas plagas: la gripe (provocada por la húmeda, la lluvia y el hacinamiento de personas en los refugios) y la leptospira (causada por el vertido de las heces y orinas de las ratas, ratones y otros animales infectados, en los ríos, canales y acueductos que sirven para elaborar agua potable). Por tanto, ya que los humanos nada podemos ante las inclemencias naturales, pedimos al Supremo Hacedor que se apiade tanto de haitianos como de dominicanos; y, desde el Sur de nuestra media isla antillana, emitimos un grito que, más bien, constituye una imprecación, en él pedimos: ¡Qué (por Dios y por todos sus santos, ángeles, arcángeles y serafines) reviva y se reactive la humana solidaridad para con el desvalido Haití!
Autor: Rodolfo Cuevas©: 07/11/2010;
todos los derechos reservados; Ley 65-00.