GRANDEZA (microrrelato)
(es éste un relato de la vida real escrito como homenaje
a Pedro Martínez, a propósito de su arribo
al Salón de la Fama del Béisbol de Cooperstown)
Ese día, el lanzador
Pedro Martínez, había "pitchado" contra los Yankees de New York, les
había ponchado 17 de sus principales bateadores, afeitado varios más de ellos (pues,
por lo muy pegado que "pitchaba", le apodaban "El barbero de
París"), y, además, les había golpeado dos de sus mejores
"bigleaguers". Indignado antes tales estragos el entonces todopoderoso
gerente general de los Yankees de New York, reunió a “Los mulos del Bronx” y
con palabras cortantes e iracundas ordenó a sus temibles bateadores: «Oigan esto, cualquier
golpeadura del enano de Pedro Martínez contra uno de ustedes, háganlo pagar la
consecuencia, pero enseguida, pues aquí tenemos la suficiente plata con qué
resolver cualquier problema que surja... ¿Oyeron bien?», preguntó y, todos, se
dieron por enterados.
A los pocos días de tal
despropósito, Pedro, que basaba su juego en una mezcolanza de disciplina,
coraje, humildad y gran amor por Dios y su patria, al enterarse de semejante
orden, expresada por tan poderoso magnate en contra de su física integridad, tan
sólo dijo al periodista que le informaba y esperaba, ya impaciente, su
respuesta: «Ese hombre tiene mucho dinero, tanto como para poder comprar todos
los equipos de Las Grandes Ligas y muchas cosas más, pero no tiene el
suficiente como para poder comprar EL MIEDO y ponerlo en mi corazón.»
Autor: Rodolfo de Jesús Cuevas; 11/01/2015;
todos los derechos reservados por la ley 65-00.
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